La iniciativa, apoyada por Corfo, pretende mejorar el funcionamiento del servicio ante un eventual desastre meteorológico extremo.
Generar un sistema computacional que tenga como finalidad alertar sobre potenciales zonas de riesgo de interrupción del suministro eléctrico, es el objetivo principal del proyecto “Sistema georreferenciado de pronóstico de riesgo para la distribución eléctrica asociado a eventos meteorológicos extremos”, iniciativa que será desarrollada en conjunto por investigadores de la Universidad de Valparaíso y la empresa regional Chilquinta Energía S.A.
El proyecto, que está financiado por Corfo, contempla la participación del Centro de Investigación y Modelamiento de Fenómenos Aleatorios de Valparaíso (Cimfav) y el Departamento de Meteorología de la UV. Busca establecer un cambio dentro del servicio que hoy en día entrega la empresa de suministro eléctrico, aportando a mejorarlo especialmente ante la ocurrencia de eventos meteorológicos extremos como lo son, principalmente, los fuertes temporales que azotan a la región durante el invierno.
Así lo indicó la directora del proyecto, María Soledad Torres, quien especificó que la idea de realizar esta iniciativa tiene que ver con “adelantarnos a tener un mapa de riesgo frente a lo que llamamos eventos meteorológicos extremos, como los temporales, que tienen muchas complicaciones como las caídas de árboles. Muchos problemas ocurren por ejemplo en los hospitales cuando falta la electricidad”.
La también directora del Cimfav agregó que “nuestro objetivo principal es adelantarnos, apoyar a la empresa, en este caso, a que ellos generen un mejor servicio en cuanto a distribuir sus cuadrillas y llegar a tiempo a los lugares donde puedan ocurrir estas catástrofes. Darles una alerta con un mapa georreferenciado donde tengamos nuestras probabilidades de donde ocurra un riesgo permanente de apagón”.
Alianza estratégica
Esteban Carvallo, jefe de Innovación de Chilquinta, manifestó lo importante que es para la empresa esta alianza con la Universidad de Valparaíso, sobre todo en iniciativas que buscan mejorar un bien básico como es el suministro eléctrico.
“Nos quisimos vincular con la Universidad y conseguir el apoyo de Corfo, y de esta manera poder anticiparnos a hacer investigación y desarrollo. Somos una de las pocas empresas de distribución eléctrica que está entrando en este ámbito”, manifestó Carvallo.
Agregó que “lo que sí queremos de todas maneras es saber dónde tenemos que poner todo nuestro despliegue en terreno antes de que pase un evento meteorológico. Actualmente, la información que existe nos permite anticiparnos con ciertos niveles, con baja probabilidad de ocurrencia. A veces nos pilla el tiempo y ocurre que estamos un poco más atrasados que los eventos, entonces queremos resolver eso, queremos llegar a tiempo a solucionar los problemas de los clientes”.
Por otro lado, la directora de Investigación, Marcela Escobar, sostuvo que esta es una iniciativa que sin duda generará un gran impacto social en la región, principalmente porque “la alianza estratégica entre nuestra Universidad y una empresa regional va a traer un beneficio para el desarrollo de la innovación y la investigación aplicada en la Universidad de Valparaíso”.
La directora comentó que gracias a este proyecto “la Universidad de Valparaíso va a cumplir fielmente con la misión de la Universidad, que es transferir el conocimiento generado y hacer de este conocimiento un bien público”.
Por su parte, Héctor Leiva, subdirector de Corfo, comentó que “es un gran orgullo poder contribuir a que se pueda prever ciertas situaciones que afectan a la comunidad, tanto desde el punto de vista económico, como de su calidad de vida. Por otro lado, permitir conectar la capacidad instalada de conocimiento que tiene la región a través de sus universidades y las necesidades que tienen las empresas regionales de solucionar problemas que afectan sus aparatos productivos o la calidad de sus servicios”.