Proyecto es desarrollado por el Departamento de Meteorología de la UV, en asociación con Chilquinta, y financiado por Corfo.
El Departamento de Meteorología de la Universidad de Valparaíso inauguró el sistema de estaciones de monitoreo de la atmósfera y que forma parte del proyecto Innova Corfo, denominado “Sistema georeferenciado de pronóstico de riesgo para la distribución eléctrica asociado a eventos meteorológicos extremos”.
La ceremonia, que se desarrolló en el Campus San Felipe donde está instalada una de las estaciones, contó con la presencia de la directora del proyecto, María Soledad Torres; el director del Departamento de Meteorología de la UV, Pablo Bilbao, además de académicos e investigadores de dicha unidad.
También estuvieron presentes la directora del Campus San Felipe, doctora Carmen Castillo; el gobernador Eduardo León; el representante de la Asociación de Agricultores, Jorge Ahumada, y ejecutivos de Chilquinta Energía.
Cabe consignar que este proyecto busca generar un modelo computacional cuya finalidad es alertar sobre potenciales zonas de riesgo y que puede derivar en la interrupción del suministro eléctrico.
La iniciativa, que está financiado por Corfo, contempla la participación del Centro de Investigación y Modelamiento de Fenómenos Aleatorios de Valparaíso (Cimfav) y el Departamento de Meteorología de la UV.
Principalmente, se busca establecer un cambio dentro del servicio que hoy en día entrega la empresa de suministro eléctrico, aportando a mejorarlo sobre todo ante la ocurrencia de eventos meteorológicos extremos como lo son, principalmente, los fuertes temporales que azotan a la región durante el invierno.
Esta idea surge tras los temporales que se registraron en mayo de 2012, que significaron prolongados cortes en el suministro eléctrico y las consiguientes molestias para los usuarios, dejando en evidencia la necesidad de contar con un sistema fiable que permita saber dónde pueden registrarse los mayores problemas y anticiparse.
Para esto se instalaron tres estaciones de monitoreo en terrenos de la Sociedad Agrícola El Sobrante, el Colegio Valle de Casablanca y en el Campus San Felipe de la UV. Los datos que se obtengan permitirán levantar este modelo de pronóstico ante eventos extremos.
La directora del proyecto, María Soledad Torres, especificó que la idea de realizar esta iniciativa es adelantarse y contar con un mapa de riesgo frente a eventos meteorológicos de mayor magnitud, que tienen muchas complicaciones como las caídas de árboles.
“Con esto entregamos información sobre la posibilidad que ocurra un evento en un lugar determinado, permitiendo que Chilquinta pueda anticiparse, es decir, que distribuya mayor número de cuadrillas en esas áreas que tienen probabilidad de registrar cortes de energía”, sostuvo.
La profesional manifestó que la empresa de energía entregó la información sobre los denominados polígonos de cortes eléctricos, “sobre esa base, nosotros generamos un mapa de riesgo en la Región de Valparaíso”.
Mientras que Pablo Bilbao, director del Departamento de Meteorología de la UV, valoró la asociación generada con Chilquinta, “la idea es hacer un prototipo que disminuya el impacto que puede originar en la población los cortes prolongados del suministro eléctrico”.
La doctora Carmen Castillo manifestó que hoy, el Campus San Felipe de la Universidad de Valparaíso, se hace partícipe de este proyecto. “Destacamos esta iniciativa, considerando que un corte prolongado provoca complicaciones, en ocasiones comprometiendo el funcionamiento normal de los servicios, entre ellos, los hospitales”.
“Así, la Universidad de Valparaíso, desarrolla investigaciones con visión de futuro, en este caso, para crear un modelo predictivo que permita responder de mejor forma ante las emergencias originadas por efectos climáticos”, sentenció.